La Catrina en mi lente: una mirada entre la vida y la muerte

Catrina de Carlos Prats Garcia

Capturar una imagen es atrapar un instante que trasciende el tiempo. En esta fotografía titulada La Catrina, busco más que un retrato: intento dialogar con la dualidad más profunda del ser humano. La muerte, representada en la figura de la catrina, no como un final, sino como una presencia eterna que nos recuerda que la vida es, precisamente, un instante.


La inspiración detrás de la fotografía

Desde hace años me fascina el simbolismo del Día de Muertos en México. En cada altar, en cada flor de cempasúchil, hay una invitación al recuerdo y una reconciliación con lo inevitable. Quise traducir ese espíritu en una imagen que hablara desde el silencio: una figura femenina cubierta por un manto, con el rostro pintado de calavera, emergiendo entre un campo de flores nocturno.
La catrina, lejos de ser un símbolo de terror, es aquí un símbolo de dignidad, elegancia y aceptación.


Composición y elementos visuales

La fotografía está tomada en blanco y negro, decisión que no busca eliminar el color, sino exaltar el contraste entre la vida y la muerte.
La textura del manto envuelve la figura con suavidad, mientras el fondo floral aporta una textura orgánica y vibrante. El rostro, pintado con precisión, se convierte en el punto de fuga emocional: una mirada directa al espectador que desafía y consuela al mismo tiempo.

El uso del contraluz suave crea un halo casi espiritual alrededor de la figura, reforzando la idea de tránsito entre dos mundos. Las sombras, profundas y densas, son parte del discurso: no hay luz sin oscuridad.


La carga simbólica: la catrina como espejo

En esta imagen, la catrina no es solo un personaje, sino una metáfora del alma humana. Su gesto tranquilo, casi piadoso, invita a la reflexión.
¿Quién observa a quién? ¿Soy yo, el fotógrafo, quien retrata a la muerte, o es ella quien me observa a través del lente, recordándome mi propia mortalidad?

El campo de flores, símbolo de la vida efímera, complementa este diálogo. Cada pétalo que aparece en la penumbra parece decir que, aunque la muerte esté presente, la belleza persiste.


Proceso creativo y técnica

Para esta fotografía utilicé una iluminación controlada en exteriores, combinando luz ambiental con un foco suave que acentuara los volúmenes del rostro y el manto.
Trabajé con una apertura amplia (f/1.8) para obtener un desenfoque natural en el fondo y dirigir la atención al sujeto central. La textura de la tela y el detalle del maquillaje se lograron gracias a una exposición precisa y una edición minimalista, respetando la naturalidad del momento.

No busqué manipular la imagen en exceso: quise que la escena respirara por sí misma, como si fuera un fragmento detenido del más allá.


El Mensaje

Esta catrina representa la belleza del tránsito. En su serenidad hay aceptación, en su mirada hay vida. Cada vez que observo esta fotografía recuerdo que la cámara no solo capta lo visible, sino lo que late entre las sombras.
Como fotógrafo, mi mayor deseo es que quien mire esta imagen sienta un estremecimiento —no de miedo, sino de conexión— con lo eterno.